Participación Democrática: Posibilidad de Cambio en Costa Rica

lunes, 15 de junio de 2009

Las estructuras que controlan el poder en muchos de nuestros países, han condicionado la participación democrática y política de las comunidades a una campaña que se realiza en los albores de una elección sea presidencial o de otro estrato de poder. Otras manifestaciones que pueden analizarse como participación política y democrática de las comunidades, son descalificadas como tales para disminuir la posibilidad de que se transformen en grupos políticamente organizados. Esta realidad socio-política se acentúa en la segunda mitad del siglo XX, y, especialmente a partir de 1980, momento en que Costa Rica adquiere grandes compromisos económicos a través de los programas de ajuste estructural.
En la primera mitad del siglo XX, la participación de algunos movimientos socio-políticos provocaron cambios importantes, tal es el caso de los movimientos obreros en las bananeras que unidos al partido comunista liderado por el Dr. Manuel Mora Valverde, la Iglesia Católica y el gobierno, construyeron un estado de derecho en la década de 1940 que generó un cambio cualitativo a la población, mismo que hoy muchos costarricenses tratamos de defender. Digno de mencionar como movimiento socio- político es la guerra civil que se llevó a cabo en 1948, los ganadores de esta contienda fortalecieron el estado social de derecho y abolieron el ejército. Los frutos de estos logros de la primera mitad del siglo XX evolucionaron hasta la década de 1970 con la creación de tres instituciones de educación superior estatal de suma importancia para la movilidad social de los ciudadanos. A partir de 1980 se inicia una lucha campal de la sociedad civil por mantener este estado de derecho contra la voluntad de los gobiernos que para cumplir con las exigencias de los planes de ajuste estructural tratan de reducir las garantías sociales y de vender empresas estatales que habían sido la base del bienestar social mediante un enlace solidario de los ciudadanos. Aproximadamente en la década de los 80, se acentúa el concepto de democracia como un momento de participación ciudadana en las campañas políticas y sobre todo, el día de las elecciones. Para fortalecer este concepto, se usa a los educadores que serán los encargados de generar en las escuelas un modelo de reproducción social. Así mismo, se usa a los medios de comunicación masiva para difundir la idea de que democracia es ir a las urnas cada cuatro años. De esta forma, cualquier otra idea de participación ciudadana como luchas en defensa de algún derecho, no serán consideradas como posible organización política. Esta estrategia de control ha generado que, aunque en Costa Rica han existido movimientos sociales fuertes en las últimas décadas, éstos no han descollado en organización política capaz de generar un cambio en las estructuras que gobiernan al país. Así, en Costa Rica se han generado grandes luchas de educadores, obreros de bananeras, movimientos de género, indígenas y el más emblemático que ha sido la lucha en contra del Tratado de libre comercio con Estados Unidos, llevada a cabo el 7 de octubre del 2007 mediante referéndum. Esta lucha sociopolítica dividió al país en dos bandos con igual cantidad de simpatizantes, y, los proponentes del tratado tuvieron que recurrir a un supuesto fraude mediático para imponer su criterio. Esta última lucha que generó la posibilidad real de formar un movimiento político fuerte, aún no ha logrado unificar criterios que guíen a este logro.
A pesar de esta realidad, los que seguimos luchando para generar este cambio, creemos que estas luchas sociales nacidas del corazón de las comunidades, deben seguir buscando la posibilidad de convertirse en una fuerza política que logre hacer sostenible nuestro estado social de derecho asediado por una clase política entregada a servir al neoliberalismo y no al pueblo.

3 comentarios

Anónimo dijo...
Anónimo dijo...

pq no lo dejo gurdado en su casa ubiera sido mejor

18 de febrero de 2010, 14:38

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